En el estado de Washington, las leyes relacionadas con la conducción en estado de ebriedad o intoxicación son rigurosas, y las consecuencias por conducir bajo los efectos del alcohol o drogas pueden ser significativas. A continuación, contestamos preguntas a situaciones frecuentes que una persona enfrentando una acusación de DUI puede tener.
¿Qué pasa apenas me detienen?
Se le dará una prueba de aliento, se recopilarán sus datos personales y se le informarán sus derechos legales. Existen posibles defensas si se le detuvo por alguna razón no justificada, la prueba se realizó inadecuadamente o no se le leyeron sus derechos, exploraremos estas más adelante.
¿Voy a ir a la cárcel?
Si esta es su primera ofensa de conducción en estado de ebriedad o drogadicción (enlace en inglés), probablemente no vaya a la cárcel. Sí puede ser que quede bajo custodia si es su segunda o tercera ofensa o si su nivel de alcohol en sangre superó 0.15. Si así fue, comparecerá ante un juez en las próximas 48 horas y este decidirá en qué condiciones dejarle en libertad y si deberá dejar fianza.
En su audiencia proxima. Aquí entran en juego posibilidades de defensa (enlace en inglés).
¿Qué defensas posibles existen?
Su abogado deberá determinar qué defensa es la apropiada para su caso específico. A grandes rasgos, defensas comunes incluyen cuestionar que el oficial tenía una razón legítima para pararlo, que el policía violó sus derechos civiles o que administró pruebas inadecuadamente.